Cerca de todo, a solo un paseo corto. Encontrarás atracciones turísticas a unos 1000 metros como el Arco de Germánico. 🚶‍♂️

Una habitación enorme e impecable con un horno de microondas, una plancha y tabla de planchar, una mesa de trabajo. Una ubicación bonita y perfecta para pasear cerca del Arco de Germánico. Y muy cerca del centro de la ciudad, de muchos lugares de interés y también de la iglesia.

Se encuentra en el corazón de la ciudad. Está el Burger Palace que sirve comida rápida tan cerca del hotel.

un hotel precioso, una ubicación excelente en el corazón del casco antiguo y un personal excelente. el desayuno estaba riquísimo y los servicios del hotel eran muy buenos. habitaciones con una cama muy cómoda.

Yo y mi pareja pasamos una noche en el Red Door Inn y la estancia fue absolutamente deliciosa. Salieron los dueños a recibirnos con los brazos abiertos, fuimos con nuestra perrita y también fue maravillosamente bien recibida. La casa está decorada con un gusto excelente, las habitaciones más de lo mismo, todo está cuidado al más puro estilo rústico francés. Por la mañana, como éramos los únicos huéspedes, nos pusieron el desayuno en el jardín a la hora que nosotros les dijimos, un desayuno que está incluido en el precio de la habitación y que fue de los mejores que tuvimos en nuestros 10 días de vacaciones en Francia. No faltó de nada, todo con productos caseros y regionales absolutamente deliciosos (fruta, zuma de naranja natural recién exprimido, tostadas de varios tipos de pan, croissants, con mantequilla y diferentes tipos de mermelada casera, yogurt casero...). Un desayuno de lujo con una compañía de lujo en un entorno de lujo, en el precioso jardín, con vistas a la catedral de Saintes. Mejor no pudo ser. 100% recomendable.

Los dueños fueron muy amables y se esforzaban para que nos sintieramos como en casa. El desayuno se merece un 10, todo casero.

No tiene ascensor y la escalera es de caracol. Para las personas con movilidad reducida no es aconsejable.

La naturalidad de ser una vivienda privada, acogedora, el trato directo con el dueño (solo una persona), y la discreta localización en el centro de la ciudad en zona antigua. Las habitaciones fantásticas aunque un poco escasas de "facilities" (solo un bote de gel en la ducha)

la relación calidad precio no me pareció adecuada, mas que como hotel se debería clasificar como bed&breakfast , esta muy recientemente habilitado y le falta bastante por rematar (mucho desorden y cosas amontonadas por todos los rincones) para que parezca un establecimiento hotelero.

Es un compendio de antigüedades bien elegidas y tiene un bonito jardín donde desayunar.

No es un hotel, es una casa en la que se alquilan habitaciones.

No se avisa antes de realizar la reserva que la habitación puede tener baño compartido. No me marché, porque eran las 21,30 horas y no tenía otra alternativa. Se debería de avisar en la misma información del hotel, que hay alguna habitacion que tiene el baño compartido con otra. El detalle no me gustó un pelo.